Las bacterias y los virus que causan infecciones comunes pueden vivir en el agua y el aire, así como en las superficies, incluso después de una limpieza normal. Los sistemas de desinfección que incorporan lámparas UV-C tienen el poder de neutralizar estos microorganismos dañinos.
Las lámparas UV-C de Philips desinfectan superficies y objetos en una amplia variedad de entornos. Estos incluyen hospitales, escuelas, oficinas, fábricas, tiendas minoristas y la industria de alimentos y bebidas, así como modos de transporte como aviones, autobuses y trenes.
Las lámparas UV-C de Philips también se pueden utilizar para desinfectar el aire de una habitación y mantener limpios los sistemas de calefacción/aire acondicionado. Funcionan en sistemas de aire superior que desinfectan el aire que pasa, sistemas UV-C abiertos o robots que desinfectan habitaciones y ubicaciones durante la noche o mientras las habitaciones no se están utilizando, así como en sistemas de aire acondicionado.
Para la purificación del agua, las lámparas UV-C de Philips se pueden aplicar en el tratamiento de aguas potables y residuales en aplicaciones residenciales, industriales y municipales. También se pueden utilizar para desinfectar el agua en piscinas, jacuzzis y estanques de peces.